Entre 1996 y 1997 se acercaron 43 etarras, 13 con delitos de sangre
El Gobierno del PP reconoció que se hizo para lograr la libertad de Ortega Lara
ELPLURAL.COM
El líder del PP, Mariano Rajoy, afirmó hoy que con la decisión sobre De Juana se cedía, por primera vez en la historia, al "chantaje" de ETA. Sin embargo mientras gobernaba el PP, entre 1996 y 1997, se acercaron 43 etarras, 13 con delitos de sangre, al País Vasco o a cárceles próximas a esta comunidad y desde el Ejecutivo de Aznar se señaló que la medida se tomaba para evitar que mataran al funcionario de prisiones José Antonio Ortega Lara, secuestrado el 17 de enero de 1996. ETA había exigido para su liberación el reagrupamiento de los presos. El secretario de organización del PSOE, José Blanco, reclamó esta mañana a Mayor Oreja, Aznar y Rajoy, que den explicaciones sobre su "doble moral".
ETA secuestró al funcionario de prisiones José Ortega Lara el 17 de enero de 1996. A cambio de su liberación, la banda exigió el reagrupamiento de los presos etarras en cárceles próximas al País Vasco. La respuesta del Gobierno de Aznar fue rápida. Entre 1996 y 1997 el Ejecutivo del PP reagrupó a 43 presos de ETA en cárceles del País Vasco o muy próximas. Al menos 13 de esos presos tenían delitos de sangre y entre todos sumaban 26 asesinatos. “Movimientos” estratégicos El Gobierno no tuvo entonces tapujos para admitir abiertamente que la medida se tomaba para intentar que ETA respondiera liberando a Ortega Lara. El Delegado del Gobierno en el País Vasco, Enrique Villar, dijo que “los movimientos que se están produciendo van en la línea de conseguir que estas personas que lo tienen retenido cambien de alguna manera su salvaje comportamiento y se obtenga la libertad de este señor”. Quitar argumentos a ETA Días después de que Jaime Mayor Oreja tomara posesión como ministro del Interior, el 6 de mayo de ese año, el hoy eurodiputado popular reconoció que la decisión de acercar presos se había tomado para quitarle a ETA argumentos con los que pudiera justificar el asesinato de Ortega Lara: "Los miembros de ETA, en el supuesto de que en un momento determinado decidieran una actuación, que ojalá no se produzca, lo tienen más complicado en el sentido de que no pueden justificar que aquí se ha producido una cerrazón y una intransigencia por parte de Interior". Acercamientos con Aznar En junio de 1996, el Gobierno de Aznar reveló que estaba estudiando reagrupar a unos 150 presos de ETA en cárceles del País Vasco. Poco después, el 23 de junio de 1996, ETA declaró una tregua de una semana, que rompió el 30 de junio, en la que pidió a Aznar que se pronunciase sobre “sus intenciones para superar el conflicto entre Euskal Herria y España”. Un día antes de la ruptura de esta tregua de siete días, el entonces ministro de Interior, Mayor Oreja, anunció el reagrupamiento de 32 presos de ETA en cárceles del País Vasco, 13 de los cuales tenían delitos de sangre.
Reagrupamientos “en función de las circunstancias” Mayor Oreja solemnizó el 29 de junio de 1996 el primer acercamiento de presos en una rueda de prensa junto al Delegado del Gobierno en el País Vasco y al Director General de Instituciones Penitenciarias. El entonces ministro de Interior aseguró que el reagrupamiento se realizaba “en función de las actuales circunstancias” y defendió una estrategia pacificadora “que sirva igual con tregua y sin tregua”. También dijo que "el Gobierno va a actuar desde la serenidad, sin situarse ni en la precipitación ni en la intransigencia". Coraje democrático para dar explicaciones.
En respuesta a la convocatoria de movilizaciones por parte de Mariano Rajoy, Blanco acusó al PP de practicar una política basada en la “radicalidad” y la “hipocresía”, ya que olvidan lo que han hecho ellos cuando tenían responsabilidades del Gobierno. Preguntó a Mayor Oreja, a Aznar y a Rajoy si el acercamiento de presos con Ortega Lara secuestrado, fue un “chantaje” y les pidió que tengan el “coraje democrático para dar explicaciones”.
La “doble moral” del PP Blanco recordó que cuando el PP acerca presos al País Vasco, el PSOE no les acusó de chantaje y respondió apoyando al partido conservador, por lo que ahora, aseguró, no van a consentir que se oculte la gestión que desarrolló el PP, en “un ejercicio de doble moral”.
Añadió que el PSOE no toma las decisiones haciendo un “cálculo electoral”, como el PP, a quien se le ve demasiado “el plumero”. Las “cesiones” del Gobierno Aznar Durante la tregua de ETA de los años 1998 y 1999, el PP fue favorable al diálogo con la banda, ralentizó las operaciones antiterroristas, invitó a 304 etarras huidos de la justicia a volver a España para no ser juzgados y, además, excarceló a 180 etarras y acercó a otros 135 a prisiones del País Vasco o próximas.
