miércoles, 18 de junio de 2008

EL XEREZ SIGUE EN SEGUNDA, EL CADIZ, NO


Reproducimos el articulo que publica Andres Cañadas en xerezmania.com

"Aquella tarde en Chapín..."


El fútbol es grande y ya no hay más que hablar, porque a pesar de lo que digan de él sus detractores, posee un alma recóndita, mágica, maravillosa, siempre gobernada por ese caprichoso dios del balompié que crearon los ingleses a finales del siglo XIX, que luego se hizo mayor entre trincheras en Centroeuropa, y que al final marchó a doctorarse a las playas de Brasil, para hacerse por siempre dueño de las almas de los que amamos este deporte.

Un deporte que sin embargo, quiso ser injusto hace tres años con la afición del Xerez C.D, que tuvo que aguantar en primera persona la humillación de ver como nuestro eterno rival, el Cádiz C.F, ascendía en Chapín a primera división, tras un partido vergonzoso que aún hoy sigue deparando más de una sospecha, y después de una semana entera en la que los políticos cadistas de nuestra zona, se habían dedicado a lanzar a los cuatro vientos, la necesidad imperiosa de que la provincia tuviese un equipo en la élite del fútbol, cuando tan sólo dos años antes se le había negado el pan y la sal al Xerez por entoces de Schuster y Oliver.

Así que ayer, mientras iba para el estadio, algo me palpitaba en el corazón que la de ayer iba a ser una tarde radicalmente distinta a la de hace tres años, también con mucho calor a la hora del partido, y también con el recinto lleno hasta la bandera, como hace tres años ocurría, por mor ya digo, de ese caprichoso dios del fútbol que ayer quiso que de nuevo jugasen en Chapín el Xerez y el Cádiz, haciendo escala en Elche y Alicante, por aquello de dar "vidilla" a los transistotres.Y así fue cómo la historia de este deporte quiso venirse a donde debía, para dejar bien claro que lo que se gana a deshonra, a desonhra prescribe tarde o temprano, y que lo que se gana a ley, a ley queda ganado "per sécula seculorum", porque si el Cádiz se llevó los puntos entonces gracias a todo menos al fútbol, regalándonos una de las tardes más amargas de nuestra historia, ayer se cobró con creces tal deshonor, yéndose a donde debía, por méritos propios, que son aquellos que uno hace cuando no tiene "ayudas externas".

Por eso, el Xerez, que ayer jugó a lo que viene jugando hace cuatro meses, es decir, al fútbol de verdad, de ese que hacen los tíos de verdad, consiguió lo que buscaba para quedarse en segunda, mientras que el Cádiz, al que ayer también se le esperó como entonces, mandó al palo el penalty que nunca debió entrar aquella tarde en Chapín, por esas cosas del dios del fútbol, también lanzado por Abraham Paz.

Lo siento mucho, muchísimo, por mis muchos amigos cadistas, pero eso es lo que tiene este deporte, que al final hace justicia y pone a cada uno en su sitio: al Xerez en segunda, y al Cádiz, toma estadio nuevo, en la categoría en la que deben estar quienes tiraron de deshonor para pasearse un año por primera división.Lo siento queridos, pero esto es lo que hay.

Y por cierto, asumo con gusto que dentro de un año podría estar tragándome lo que ahora escribo, pero es que resulta que así es esto, y yo lo sé sobradamente, por lo que ahora mismo, "que me vayan quitando lo bailao", mientras ustedes siguen dándonos lecciones de buen mamar.

¿O no es eso lo que gritan habitualmente en las gradas de Carranza?